Llevo unos días dando vueltas a qué es eso de ser normal. Me noto diferente a mi entorno. Pienso en temas diferentes. Reflexiono sobre temas diferentes. Me interesan temas diferentes. Tengo un estilo de vida diferente.
Y pienso: ¿soy rara?
En el fondo creo que sí y cada vez me importa menos que me lo digan. Aunque es verdad que es un cuchillo de doble filo. Puede ser un piropo. Puede ser un adjetivo dicho con desagrado, desaprobación y crítica.
Pienso que lo que consideramos raro es lo que no entendemos y no nos esforzamos por entender.
Nos parece raro que en Asia se quiten los zapatos al entrar en casa.
Nos parece raro que haya países que te sirvan un vaso de agua con gas con el café porque aquí se sirve agua mineral.
Nos parece raro que una chica viaje sola.
Nos parece raro que Zendaya sea más alta de Tom Holland.
Pero cuando lo consideramos raro como crítica, no es más que un prejuicio hacia lo desconocido, hacia lo que encaja en lo que pensamos que es lo normal.
Y pienso: ¿existe lo normal?
Ser diferente no es un defecto ni un insulto: es un acto de libertad y valentía. Y esas dos, puestas en una coctelera, te acercan un poco más a la felicidad o, al menso, te aleja de la insatisfacción de fingir ser alguien que no eres solo por gustar a los demás.
No quiero ser normal.
Vivo una vida que para algunos es un sueño, para otros una tortura. Otros me dicen que no lo entienden y otros repiten que me admiran. Y todo eso está bien. Porque no hablan de mí, hablan de ellos, de sus miedos y su forma de ver la vida.
Sigo pensando que lucharé para no volver ordinario lo extraordinario que me pasa en la vida.
Y si alguien me llama rara, lo único que haré será sonreír y darle las gracias.
✨ Cosas que han ocurrido últimamente
He grabado nuevo podcast sobre ser freelancer, teletrabajar y dedicarme a la escritura. Os paso enlace para que bicheéis.
Y hablando de podcast, he lanzado el primer episodio de Curiosidad Encapsulada así que afinad los oídos. Está por aquí. Pero si eres más de leer (o las 2 cosas), aquí tienes las tienes por escrito.
Me argentinicé un poco leyendo a Borges (gracias por el regalo Guido), a mi amiga medio-argentina Carla y a Leila Guerreiro intentando seguir la pista del fantasma de Truman Capote en la Costa Brava. También el último libro de Derek Sivers.
Descubrí una nueva cafetería rara con una personalidad peculiar en Barcelona que pronto encontraréis en Creare.

👋 Me encanta cuando me escribís para comentar un tema que os ha movido, así que me tenéis por por aquí o respondiendo a este correo.
Si acabas de cobrar o te has levantado con el generoso subido, puedes aportar a este pequeño rincón invitándome a un café calentito.
🙋♀️ Si no quieres perderte las siguientes cartas,👇
🔎 También me encuentras por aquí: Instagram, Twitter, Threads y YouTube.